Pàgina:Memorias de mon viatge á la América del Sud en lo vapor espanyol Fivaller (1884).djvu/23

 Unos duermen por aquí:
 Otros duermen por allá:
 Y otros muchos que yo veo,
 Se acuestan más acá?

 Cuál es la vida del hombre
 Desde 60 años de edad:
 Recuerdos mas bien tristes
 Que cosas para alegrar?

 La juventud es hermosa:
 Es muy fea la vejez:
 Y el que así no se lo mira
 Lo cree todo al revés?

 Si el hombre tiene dinero
 Lo desea acabar:
 Y si un pobre no lo tiene
 De seguro un mal estar?

 Recuerdo muy bien de Adan,
 De segunda y de tercera,
 Y tambien los de primera,
 Y del jóven sacristan?

 Se conocen los casados,
 Los que viven en la miel,
 No se dejan un instante
 Mientras dure aquél?

 Es de la vida mejor el paso
 El que acabo de indicar:
 Más tarde, señores míos,
 Ya no es el mismo estar?

 fin

 Com á recompensa al seu trevall la tripulació y 'l passatge deci­diren obsequiar al autor de tan preciada obra, ab un regalo que consistí en un caixó de puros plé d' avellanas y atmetllas, tancat y clavat ab puntas de Paris y cubert de paper groch en lo que s' hi llegían varias inscripcions de sos admiradors, entre las cuals recordo las següents:
 «Honor al mérito.»—«Gran cruz de avellanas y toison de almendras concedidos á D. Salvador.»—«Más vale hacer versos que nave­gar.»—«El trabajo encuentra su recompensa.»—«El talento sirve mucho.»—«La instruccion es hija del estudio,» etc.
 A la una de la nit, hora en que s' acabá la broma, anarem tots á retiro y l'endemá á las vuit del matí vingué pera darnos entrada un vaporet que portaba á son bordo la comissió sanitaria de la ca­pital d' aquella república. Als pochs minuts arribá un altre vaporet qu' era de la capitanía del port. Pujaren sos individuos á bordo del Fivaller y allavoras comensarem ja á coneixer los tipos d' aquell país.
 Se li ocorregué al metge de la sanitat fernos posar á tots, tripula-